Por la las lunas de marfil de la ciudad legendaria habitaba una Ranita Verde, despierta en las noches cantaba de fiesta en fiesta, de charca en charca, saciada de burbujitas de amor se enfrentaba al mismo cielo con todo su ardor .Pues era hábito en ella ser un remolino de ternuras y ella cantaba canciones verdes y blancas .El coro de las demás ranitas, no podían igualar su canto .Irresistible navegaba en una hoja de los nenúfares del estanque y era la reina por belleza y dulzura. La conocí una primavera y casi llegando el verano me resultaba imposible no quererla ,arrastraba las miradas de todo el estanque y a pesar de ser la más bella ,nunca se permitía ser presumida ,sus manos con pequeños tentáculos ...muy pequeños tenían un tacto divino y supe que sin duda aparte de mágica ,dentro de ella habitaba un ser que por extraño hechizo ,quedó atrapada en la Ranita .Busqué mil razones ,podría habérselo preguntado ,pero temía ser indiscreta .Una noche de tormenta en la que todas las ranitas corrían a buscar refugio de los rayos la vi erguida y feliz dejando que la lluvia la bautizara ,dejando que la luz de cada relámpago iluminara su rostro amado. Así supe que ella era la más feliz de las Ranitas, porque era su elección, quiso ser libre y vivir en un mundo con muchas lunas de marfil, cerca de la ciudad que la vio nacer, ella fue una mujer pero rechazó su dura carga, se liberó de lo que frenaba su libertad de vivir y con un brebaje mágico que le dio una renombrada hechicera llamada Liliana...se convirtió en rana.
©Noemí_Alas
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